lunes, 16 de mayo de 2011

Día europeo de la obesidad 2011


 El próximo sábado 21 de mayo se celebrará el día europeo de la obesidad. En la web de los promotores se expone que:
La campaña 2011 del Día Europeo de la Obesidad se llama “DETENGA EL YOYO”. Convocamos a profesionales sanitarios y profesionales responsables de formular políticas para ayudar a los ciudadanos a vencer el peligroso ciclo de pérdida y aumento de peso reiterados y sus terribles efectos en la salud física y mental, como por ejemplo el estrés psicológico y la depresión.
Tratar de perder mucho peso en poco tiempo puede, en realidad, convertirse en un obstáculo para alcanzar y mantener un peso saludable. En algunos casos, puede significar un aumento que tenga como resultado un peso superior al inicial. Queremos que los ciudadanos visiten a su doctor o profesional sanitario, que consulten cuál es un peso saludable para ellos y cuál es la manera correcta de llegar a dicho peso y mantenerlo.
Buscando por la red alguna propuesta para tratar la obesidad infantil en las escuelas me he encontrado con esta página de Consumer-Eroski y con esta otra de la organización Active School que nos pueden dar mucho juego. Mención aparte merece la Estrategia NAOS promovida por el Ministerio de Sanidad, muy en la línea del Programa Perseo que ya comenté en otra entrada. De ahí os dejo la Pirámide NAOS:


Ahora toca plantearse si desde nuestra área podemos desarrollar estos planteamientos y cómo. Hala, ya tenemos faena para verano.

2 comentarios:

David Argente dijo...

El día de la obesidad es el dia que la mamá o el papá le compran las chuches a su hijo como rutina. El día que no le prepara el almuerzo sino que le compra un pastelito para que almuerze. Es el día en que el supermercado pone de oferta toda la comida basura fácil de consumir. El día de la obesidad es el día que los gobiernos dejan negociar a las grandes coorporaciones para que nos den basura para alimentarnos. ES TODO UN NEGOCIO Engorda engorda y despues adelgaza adelgaza...

elmaestrojuan dijo...

Totalmente de acuerdo David, de ahí lo del YOYÓ. Guardar el equilibrio en la dieta diaria sería lo más fácil pero para eso necesitamos tiempo para cocinar y una buena dosis de valor para enfrentarse a quién nos pueda mirar raro (eso incluye a familiares y amigos) por evitar que nuestro hijo/a coma en cualquier momento pastelitos, gusanitos, chuches, zumos de brick, cocacolas, etc.